En el homenaje que la Federación de Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana (FSMCV) realizó ayer a las 22 bandas que, en 1967, decidieron constituir esta federación, entre ellas la Schola Chantorum de la Vall la única de la provincia de Castellón, la FSMCV reivindica el papel de «agente cultural de las bandas».

Pedro Rodríguez, presidente de la federación bandística, recordó que «la FSMCV, que conforma el 50% de las bandas de música en España, cuenta con 40.000 músicos, 60.000 educandos y más de 200.000 socios, cifras que evidencian que nuestro movimiento asociativo trabajan por y para la cultura en mayúsculas».

El acto de homenaje a las 22 bandas de música fundadoras se celebró el Lliria, precisamente el ligar donde un 10 se de septiembre de 1967 se reunían estos colectivos para crear una federación que les agrupara.