Las fiestas patronales de la Soledad de Nules llegaron ayer a su fin con la celebración de los principales actos religiosos.

La jornada dio inicio con el traslado de la imagen de la Mare de Déu desde su capilla hasta la iglesia arciprestral de San Bartolomé y San Jaime, donde se ofició la misa solemne, cantada por la Coral Sant Bartomeu. y en la no faltaron las reinas de la Vila, Paula Molina y Maite Benlloch, sus damas de honor y las autoridades municipales, quienes también participaron por la tarde en la ofrenda de flores a la Soledad y en la procesión.

El alcalde de Nules, Mario García, aprovechando la última jornada festiva, afirmó que “el fallecimiento de un vecino en la primera tarde de vacas hace imposible que se pueda realizar un balance positivo de la semana, a pesar de que el resto de actos hayan transcurrido con normalidad”. García señaló que “este tipo de sucesos rompen necesariamente el ritmo de las celebraciones y hacen que las cosas ya no sean igual”.

Sin embargo, con la salvedad de los actos programados en la jornada del martes, el resto del programa festivo se ha desarrollado con normalidad, con especial significación para la gala de los Jocs Florals, con la que se inauguró la semana, la exhibición de cinco bous per la vila o la Nit de la Torrà, en la que participaron más de 2.000 personas “atraídas por la verdadera esencia de cualquier celebración popular: salir a la calle y disfrutar con el resto de vecinos”. H