La tradición dice que el tercer domingo de cuaresma del año 1252 tuvo lugar el traslado de la población del primigenio Castellón que ocupaba el Castell Vell en el cerro de la Magdalena, al llano. Ese día, el mal tiempo complicó el traslado y en medio de una gran tormenta llegaron a la plana ya entrada la noche. Aquí nace Castellón de la Plana.

Este hecho propició que en años venideros (al menos desde 1375 se tienen noticias de ello) se celebrase una romería con carácter de rogativa hasta la montanyeta, donde se construyó una ermita. Y desde entonces, año tras año, se ha venido celebrando esta subida al cerro de la Magdalena. Solo en los años de la II República se dejó de ir a la ermita de la Magdalena teniendo por fuerza que realizar la rogativa dentro de las naves de la iglesia de Santa María.

Pero las fiestas de la Magdalena tal como las conocemos hoy tienen su origen en el año 1945. En aquel año, a partir de este embrión que es la romería al ermitorio, se desplegó un programa de fiestas que en su conjunto es el que continúa hoy. H