Querido/a lector/a, el fin de semana pasado se ha celebrado en Almenara el tercer congreso del PSPV-PSOE de la provincia de Castellón y, si tuviera que definir lo que ha pasado por la dirección elegida y sus conclusiones, diría que ha sido un congreso de jóvenes, comprometidos con la política, de izquierdas, con vocación de dirigir desde la transparencia y la participación un partido que no acepta ser comparsa de las instituciones y que, además, entiende como imprescindible el trabajo en equipo y la plena integración de afiliados y posiciones.

Digo de jóvenes porqué creo que Fabián y el que suscribe este artículo, que solo rayamos los 65 años, somos los más fijos. Digo comprometidos con la política porque son gente que lejos de euforias y depresiones pasajeras hacen de la política una actividad permanente que entienden como una labor imprescindible para la convivencia. Digo de izquierdas porque consideran a la política como el único poder al alcance de quienes nada tienen y debe servir para defender la justicia social y el bien común. Digo con vocación de dirigir el partido desde la participación y la transparencia porque se les reclama tener posición sobre todas las circunstancias que afectan a las gentes y tierras de Castellón y tomar las decisiones de forma colectiva con los militantes y las agrupaciones. Digo que dirigirán un partido que no quiere ser acompañante de las instituciones y, por ello, reclaman y conseguirán que tenga vida propia, sobre todo manteniendo la relación con la sociedad y elaborando el programa socialista. Digo del trabajo en equipo y la integración porque son conscientes de que la acción política sólo es fecunda cuando va en sentido contrario a la reflexión solitaria, a la reductio ad unum, y se confronta, con los acontecimientos, las ideas… para después confederarse y buscar la unidad de acción y la cohesión necesaria para conseguir el liderazgo social requerido.

*Analista político