Querido lector:

El lío que se ha montado en Compromís tras más de un año intentando concitar un reglamento de primarias para la elección de sus candidatos es monumental. No se lo puedo resumir porque necesitaría medio periódico para ello, pero al final de la movida podemos extraer al menos algunas conclusiones importantes para comprender el devenir futuro de esta coalición, formada en más de un 80% por el Bloc y en un 20% por Iniciativa del Poble Valencià y Els Verds - Esquerra Ecologista del País Valencià y los afiliados a la coalición una vez formada y que pertenecen a Compromís pero no a ninguno de sus integrantes.

La primera de ellas es que finalmente ha primado el miedo escénico ante las encuestas y como consecuencia el interés electoral sobre cualquier otro parámetro, incluso el de pasarse por el forro la democratizacion interna tan preconizada como son unas elecciones primarias. Así, la candidata a la presidencia de la Generalitat será Mònica Oltra, de Iniciativa, la líder más mediática y la más cercana a Podemos (de ahí lo del miedo). Y eso en un sistema de primarias sin elecciones (el que lo entienda que me lo diga), no fuera a quedar en mal lugar Enric Morera, secretario general del Bloc.

La segunda conclusión, que a buen seguro determinará el futuro de la coalición, es que el Bloc a pesar de ser la fuerza mayoritaria ha resultado ser el gran perdedor. Morera ha perdido el pulso personal con Oltra, pero además ha sido el que ha llevado al sin sentido más profundo a Compromís de Castellón ciudad, provocando un distanciamiento absoluto con el cabeza visible de la coalición en la capital de la Plana, Enric Nomdedéu, al imponerle los números 3 y 4 de su lista municipal sin opción a decidir y con la obligación de tragar, cuando aquí Iniciativa prácticamente no existe (ya veremos qué dice la militancia).

Y en tercer lugar, la imagen dada de división, de criterios estalinistas, de falsa democracia con primarias aleatorias o de electoralismo interesado, le puede pasar factura, bien restándole fiabilidad como socio o bien minándole respaldo electoral.