Ratón, el toro más cotizado de los encierros de toda España, ha muerto. Con 12 años y tres fallecidos a sus espaldas, además de decenas de heridos por cornada, ha sido un animal tan temido como venerado por los aficionados a los bous al carrer, ya que incluso tenía una página en facebook con más de 10.000 seguidores, que ayer se mostraban incrédulos ante esta pérdida para el mundo taurino.

Ratón nació en abril del 2001, y pertenecía a la ganadería Gregorio de Jesús, en Sueca (Valencia). Hijo del toro Caracol y de la vaca Fusilera, lo llamaron así por su pequeño tamaño. Su primera actuación fue en septiembre de 2002 y en 2004 embistió por primera vez en Canals, un hecho que hizo aumentar su popularidad y comenzó a ser solicitado.

Los incidentes de 2006 en Yátova y en Sagunto, donde un hombre falleció, incrementaron su caché, llegando a pagarse hasta 15.000 euros por su actuación. Dos años después, se cobraba una segunda víctima en Benifairó y en 2011 la tercera, en Xàtiva.

El morlaco ya estaba retirado y destinado únicamente a tareas de semental, aunque su dueño mostró su interés en clonarlo en 2010. Gregorio de Jesús explicó ayer a los medios que su cuerpo será embalsamado y expuesto al público en la finca que tiene en la partida de Campanar, en el municipio valenciano de Sueca. H