Vila-real sufrió ayer por la tarde un incendio sin heridos junto a una fábrica abandonada muy próxima a la nueva rotonda del Hospital la Plana, en donde también hay una gasolinera. Sucedió a las 17.55 horas, cuando el fuego comenzó a afectar a hierbas y matorrales en un patio exterior del antiguo almacén.
Las llamas se extendieron debido a las fuertes rachas de viento, afectando a montones de palets, restos de madera y serrín, que estaban almacenados en el patio exterior de la fábrica.
El Consorcio de Bomberos movilizó un total de tres dotaciones del parque de la Plana Baixa con cuatro vehículos, ocho bomberos ,un cabo y un sargento, que trabajaron a toda velocidad para parar el fuego.
Las labores de extinción se desarrollaron con la ayuda de una máquina excavadora para mover la madera que había ardido. Desde el SIAB informaron de que “en ningún momento ha habido riesgo de que el incendio llegara a la gasolinera”, que está situada a escasos metros. De hecho, la misma no fue desalojada y continuó abierta al público.
El CICU y la policía confirmaron a este diario que no hubo que atender a ningún vecino.
El humo afectó a las inmediaciones y a la N-340, desde donde podía divisarse a la perfección la columna de humo negro que emergía del incendio. Los bomberos continuaron refrescando la zona durante parte de la noche para prevenir rebrotes. H
