Será juzgado el lunes. El ciudadano de origen rumano, Raúl T., que presuntamente acuchilló hace ahora un año a su expareja en Benicàssim, se enfrenta a una pena de cárcel de 14 años y medio como supuesto autor de un delito de asesinato en grado de tentativa. El fiscal delegado de Violencia de Género, Francisco Sanahuja, reclama, además, una indemnización que supera los 72.000 euros por las secuelas y el perjuicio moral ocasionado a la víctima.

El juicio será con jurado popular y comenzará a partir de las 10.00 horas en la sala de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Castellón.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, el procesado mantuvo una relación sentimental con la víctima que duró más de 12 años, conviviendo ambos en un domicilio de Benicàssim durante 10. Estando ya la relación deteriorada, a finales del año 2012, el procesado se fue al Reino Unido a buscar trabajo, manteniendo contacto telemático con la víctima hasta que en el mes de agosto del 2013 la mujer viajó a Inglaterra para plantearle de nuevo la ruptura. Cuando él volvió a España, abandonó la vivienda.

A partir de ese momento, el procesado efectuó numerosas llamadas telefónicas y remitió mensajes a la mujer con el propósito de retomar la relación, pero fue rechazado siempre por esta. Entonces, según el fiscal, supuestamente tomó la decisión de acabar con su vida. Así las cosas, el fin de semana del 21 a 22 de septiembre del 2013, Raúl T. decidió llevar a cabo su plan. Presuntamente se dirigió al domicilio de la víctima, llevando consigo un cuchillo de 32 centímetros de longitud (21 de hoja). Llegó al lugar sobre las 22.30 horas y logró entrar en el portal aprovechando que la cerradura de la puerta estaba rota.

APAGÓ LAS LUCES // Ya en el interior, según la Fiscalía, para sorprender a su víctima, desenroscó las bombillas del zaguán y de la primera planta y se sentó a esperar, en la oscuridad, en un sillón que colocó en el rellano de acceso al trastero comunitario. Pasadas unas horas, como ella no llegaba, salió a comprar una botella de agua en una cafetería próxima.

Sobre las dos de la madrugada la víctima llegó al lugar. Fue entonces, según el fiscal, cuando de forma sorpresiva, supuestamente se abalanzó sobre ella por la espalda, girándose esta, momento en que él le tapó la boca.

GRITOS // Tras un forcejeo, le propinó varias cuchilladas por el cuerpo. Al escuchar que un vecino bajaba alertado por los gritos de la mujer, el acusado cesó en su acción e intentó huir por el patio interior. El acusado, añade el fiscal, al no poder saltar la pared, se sintió acorralado y, pensando que había matado a su expareja, se hizo un gran corte con el cuchillo en el abdomen para suicidarse.

La víctima subió arrastrándose hasta el segundo piso y fue auxiliada por las personas que convivían con ella que avisaron a la Policía Local y a la Guardia Civil.

EN LA UCI // Una ambulancia la trasladó rápidamente hasta el Hospital General, donde ingresó en la UCI muy grave. El acusado también fue atendido en la UCI.

La víctima tardó en curar 221 días y estuvo ingresada dos meses. Sufrió lesiones en las manos, en la zona umbilical y en el páncreas, así como en el muslo y gemelo izquierdos. Para el fiscal, si la mujer no hubiera sido asistida en ese momento, hubiera muerto. H