Susto ayer en Benicàssim después de declararse un incendio en un apartamento, al parecer, provocado por una vela encendida junto a la urna donde estaban depositadas las cenizas de un perro, según pudo saber Mediterráneo. Afortunadamente, gracias a la rápida actuación de un bombero que reside en la finca y que usó un extintor, el fuego no se extendió y fue finalmente apagado.
Las llamas comenzaron alrededor de las 7.30 horas de la mañana. Varios vecinos avisaron al teléfono de emergencias 112 para alertar de que estaba saliendo mucho humo de un segundo piso del edificio Costa Brasil, ubicado en la calle Felipe II.
Un vecino del inmueble, bombero de profesión y que trabaja en la capital de la Plana, decidió acceder al piso a través del balcón con un extintor en las manos para intentar sofocar el fuego por su propia cuenta como medida de urgencia. Y es que las llamas estaban afectando al mobiliario y a objetos inflamables, por lo que salía una densa humareda que podía divisarse desde el exterior.
PATADA EN LA PUERTA // Al mismo tiempo, una patrulla de la Policía Local de Benicàssim se desplazó hasta el lugar rápidamente. Los agentes subieron hasta el segundo piso y decidieron abrir la puerta de una patada, ya que algunos vecinos indicaron que podía haber una persona en el interior. No obstante el humo hacía imposible acceder al interior del piso.
Los agentes municipales, junto con la Guardia Civil, tuvieron que aguardar hasta la llegara de los bomberos del Consorcio Provincial procedentes del parque de Orpesa. Cuando estos llegaron con los camiones, desplegaron todos los medios necesarios y en cuestión de una hora el fuego quedó completamente extinguido.
130 VIVIENDAS // En el edificio hay 130 viviendas, pero solo durante el verano se concentran el mayor número de residentes, que puede llegar a alcanzar los 400, según explicaron varios vecinos. Ayer por la mañana apenas había una docena de personas en la finca y la Policía Local no tuvo que evacuar a ninguna, puesto que el fuego no llegó a expandirse debido a la eficaz actuación que llevaron a cabo tanto la Policía Local, como la Guardia Civil, los bomberos del Consorcio y el bombero que vive en el mismo bloque.
La Policía Local procedió a regular el tráfico hasta que los bomberos del Consorcio Provincial finalizaron la extinción y ventilaron todas las estancias de la vivienda, que quedó visiblemente afectada por la densa humareda. H
