Al menos unos 34.000 asalariados castellonenses trabajan para firmas muy pequeñas o en sectores en los que no existe un convenio colectivo que regule sus condiciones laborales, lo que representa casi uno de cada cinco de quienes están dados de alta en la Seguridad Social, según las estimaciones realizadas por CCOO en la provincia.

A estos trabajadores que están fuera de la cobertura, se suman, casi 40.000 empleados por cuenta propia, los autónomos, de los que muchos son los llamados ‘trade’, es decir, que desempeñan sus tareas en exclusiva para una sola empresa, de modo que son trabajadores por cuenta ajena encubiertos, pero que carecen de los derechos propios de estos últimos.

Un último grupo que no deja de crecer como consecuencia de la crisis económica y que es el más desprotegido desde todos los puntos de vista es el de aquellos que ni siquiera están dados de alta. Los sindicatos estiman que los empleados de la economía sumergida rondan ya los 13.000.