Caixa Rural Vila-real cerró el ejercicio 2015 afianzando su solvencia, al sumar un capital social de 5,2 millones de euros, lo que supone incrementar este fondo en un 16,5% respecto al 2014.

Así lo anunciaron ayer el presidente de la entidad, Enric Portalés; y el director general, Manuel Cubertorer, en la asamblea anual que la entidad celebró en el Auditori Municipal y a la que asistieron cientos de socios.

Precisamente, Portalés destacó el aumento de la masa social hasta alcanzar la cifra de 12.228 socios. “Con estos datos constatamos la sólida implantación de la entidad en nuestra ciudad, que sigue siendo uno de los principales activos de Caixa Rural”, dijo.

Por su parte, Cubertorer dio cuenta de otros datos del balance del pasado ejercicio, como son el mantenimiento de la cuota de mercado y del número de clientes, así como el resultado de beneficios que, debido al escaso margen que dan los actuales intereses, se quedó en 357.000 euros, de los que la mitad se destina a los fondos de formación.

Por otra parte, la asamblea ratificó ayer la reducción del número de integrantes del consejo rector, que pasa de 12 a 10 miembros, así como de consejeros suplentes --de cuatro a dos--; y la sustitución de parte del mismo, como marcan los estatutos de Caixa Rural. De esta forma, dejaron su cargo Vicente Pesudo, José Balaguer y Llorenç Rubert. Mientras, en su lugar entran en el consejo rector Enric Reverter y Juanjo Ortells. H