La corporación municipal de Vila-real ratificó ayer, en el transcurso de un pleno extraordinario convocado para la ocasión y que tan solo duró tres minutos, el presupuesto municipal para el 2017 --que asciende a 45,6 millones de euros--, que ya se aprobó inicialmente el 10 de enero.

La presentación de una alegación desde el servicio de Recursos Humanos, que solicitaba el cambio de nomenclatura en la descripción de cuatro puestos de trabajo del personal empleado municipal, ha obligado a resolver la misma y a aprobar definitivamente en pleno la plantilla presupuestaria para este ejercicio, con la abstención del PP y C’s.