FÚTBOL PROVINCIAL

Clásicos del fútbol provincial | La nostalgia de tiempos mejores

Históricos con pasado reciente en categoría nacional como el Segorbe y el Borriol tratan de resurgir en 'nuestro' fútbol y otros como el Benicasim está sufriendo una de las etapas más complicadas de su historia en Segunda FFCV  

Tres clásicos del fútbol provincial: Benicasim (arriba), Segorge (abajo izquierda) y Borriol (abajo derecha), quieren resurgir.

Tres clásicos del fútbol provincial: Benicasim (arriba), Segorge (abajo izquierda) y Borriol (abajo derecha), quieren resurgir. / Jorge Sastriques

El fútbol es cambiante, hoy tocas el cielo y mañana puedes sufrir un calvario alejado de los focos. Esto último les sucede a diversos equipos del fútbol provincial en la actualidad. Sin ir más lejos, tres equipos con pasado en categoría nacional están en zona de descenso a Tercera Federación o compiten en la última categoría del fútbol regional. 

No corren buenos tiempos en Benicàssim. El histórico CD Benicasim, que entre 2004 y 2006 tocó techo en Tercera División, preveía una campaña de transición pero lo que tenía que ser tal se ha convertido en un verdadero calvario. El conjunto rojiblanco es colista del Grupo I de Segunda Federación cuando ya se ha superado el primer tercio de la liga y todavía no ha logrado puntuar. Los benicenses tienen la permanencia a diez puntos y en las primeras 11 jornadas solo han marcado seis goles y ha encajado la friolera de 50. 

El CD Benicasim, el conjunto del Municipal de la Torre de San Vicent debe reaccionar si quiere mantener la categoría en Segunda FFCV.

El CD Benicasim, el conjunto del Municipal de la Torre de San Vicent debe reaccionar si quiere mantener la categoría en Segunda FFCV. / Jorge Sastriques

Borriol y Segorbe

Más abajo se encuentran Borriol y Segorbe, dos escuadras con pasado reciente en Tercera División, los rojillos compitieron en dicha categoría cuando era el cuarto nivel nacional y lo hicieron entre 2010 y 2014 y entre 2015 y 2018; mientras que el cuadro del Alto Palancia lo hizo en el curso 2016/17. No obstante, ambos compiten ahora en Tercera FFCV, novena y última división, eso sí, trabajan duro para escalar categorías. 

El conjunto de El Palmar es tercero a dos puntos del líder y tiene el objetivo del ascenso en su cuarta temporada consecutiva en la categoría más humilde. Algo parecido le sucede al Segorbe, que tras dos años sin equipo y cinco en el último eslabón futbolístico, también es tercero en su grupo y uno de los claros candidatos al ascenso directo.

El CD Segorbe está resurgiendo, los del Alto Palancia generan ilusión.

El CD Segorbe está resurgiendo, los del Alto Palancia generan ilusión. / Jorge Sastriques

También pretenden reverdecer laureles equipos como el Catí o el Vilafamés, que compitieron por última vez en Regional Preferente en los años 2014 y 2012 respectivamente, mención especial para los de L’Estepar, que marcaron una etapa de seis campañas consecutivas en la categoría. Actualmente ambos están inmersos en la lucha por el ascenso a Segunda FFCV cerca de la zona alta. 

En la misma línea está el Vila d’Onda, que en 2021 jugaba en Preferente y tras dos descensos consecutivos se vio en Segunda Regional la pasada campaña. Los ondenses, tras perder terreno con la instauración de la nueva Lliga Comunitat, anhelan un ascenso por el que están en la pugna. 

Tras años en Tercera, el CF Borriol quiere resurgir.

Tras años en Tercera, el CF Borriol quiere resurgir. / Jorge Sastriques

Otros clásicos provinciales

Más lejano parece el regreso a categorías superiores de La Pobla, Benicense o Albocácer, todos ellos con temporadas en Regional Preferente, especialmente para el cuadro de La Planeta, que es antepenúltimo en Tercera Federación, cuando hace poco más de una década era uno de los pocos equipos de interior que podía presumir de competir en Preferente (en 2012).

Sant Mateu y Benlloch, nombres distinguidos en el fútbol provincial, de hecho los segundos rozaron el ascenso a Tercera División en dos ocasiones tiempo atrás, concretamente en 2009 y 2010, han vuelto a sacar sus proyectos a competir con la ilusión de llegar lejos dentro de unos años. Pero si unos miran hacia arriba otros lo hacen hacia abajo con la intención de no perder una categoría que cuesta muchísimo de recuperar, es el caso de equipos como el Peñíscola, Orpesa o La Vilalleva. 

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