Descubre la isla que es medio año de España y medio año de Francia

España y Francia han mantenido a lo largo de la historia innumerables disputas, tanto militares como territoriales, y una de ellas fue la Guerra Franco-Española, entre 1635 y 1659, conflicto que, sin embargo nos dejaría uno de los iconos de concordia entre ambos países. Desde ese conflicto militar, España y Francia comparten armoniosamente un pequeño territorio, que se reparten a partes iguales. Medio año, ese pequeño trozo de terreno es español; el otro medio, galo.

Se trata del Condominio de la Isla de los Faisanes, también conocida como Île des Faisans en francés, es un territorio compartido entre España y Francia en el río Bidasoa, que marca la frontera entre los dos países. Esta pequeña isla es el condominio más pequeño del mundo, con tiene una superficie de aproximadamente 6.800 metros cuadrados (menos de 200 metros de largo por otros 40 de ancho) y es conocida por su rica historia. La Isla de los Faisanes, también denominada Isla de la Conferencia o Isla de los Diplomáticos fue el escenario donde se firmó el 7 de noviembre de 1659 el Tratado de los Pirineos, por el cual se instauró la paz entre España y Francia tras la guerra de los Treinta Años, además de acordarse el matrimonio de Luís XIV con María Teresa de Austria, Infanta de España.

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Con el fin de evitar que la isla se convirtiera en un territorio no legislado, y para poner fin a las diferencias entre los pescadores de las dos riberas del río Bidasoa, los dos estados decidieron, a finales del siglo XIX, confiar su jurisdicción y orden a los dos Comandantes de las Estaciones Navales ribereñas de Fuenterrabía-Hondarribia y Hendaya.

Dichos Comandantes son hoy en día representados por los Comandantes Navales de Bayona y San Sebastián; relevándose al frente de la jurisdicción de la isla cada seis meses.

La Isla de los Faisanes no tiene población permanente. La isla es administrada por ambos países como un condominio, por lo que solo es visitada por los representantes españoles y franceses que se reúnen allí cada seis meses para la ceremonia de transferencia simbólica de la soberanía. Además de los representantes gubernamentales, la isla también es visitada por turistas que pueden cruzar el río Bidasoa en bote para explorar la isla, que durante los meses de verano está abierta al público.