Castellón cuenta este verano, donde se multiplica la población entre los residente habituales y los turistas, con más espacios seguros donde denunciar la violencia machista por parte de víctimas o testigos. Los denominados puntos violeta, que comenzaron a implantarse en festivales de música y en fiestas de los pueblos del interior, en esta campaña están en funcionamiento también en más de una treintena de Tourist Info de la provincia, tanto en referentes turísticos de la costa, como Peñíscola, Benicàssim o Alcossebre; como del interior, en Morella o Navajas, entre otros. 

«No hemos atendido ninguna consulta por violencia de género. Y ojalá no ocurra ningún episodio de este tipo. Tenemos el protocolo para dar aviso a la Policía y atender a la víctima», explicó la responsable de una oficina turística donde consta el distintivo de punto violeta, una herramienta más contra la violencia machista.

Proyecto piloto

Las oficinas de turismo son un punto próximo y generalizado precisamente en el periodo vacacional donde, además de ofrecer información, señalan, su función se ha ido reinventando y en más de una ocasión va más allá, de modo que la ciudadanía recurre a ellos ante el primer aviso «de un niño desaparecido o una herida tras una caída fortuita», relatan. El proyecto de puntos violeta se ha impulsado desde Turisme, a través de la Red Tourist Info en toda la Comunitat, conjuntamente con el Institut Valencià de les Dones, «creado para atender, informar y ayudar a víctimas de cualquier tipo de agresión sexista de manera inmediata. Su propósito es concienciar, prevenir e identificar situaciones de violencia de género, facilitando el disfrute del periodo vacacional, bajo el respeto hacia las mujeres, libres de acoso y humillación machista».

A finales de julio el propio Ministerio de Igualdad activó una campaña para que cualquier negocio o comercio pueda sumarse a esta red de apoyo, desde una panadería a una tienda de ropa. En su web informan paso a paso cómo adherirse, con material de descarga gratuita de carteles y adhesivos con un código QR vinculado a la Guía Punto Violeta, que pueden imprimir y colocar en un lugar visible en sus establecimientos.

«Próximos meses»

Asimismo, desde la Conselleria de Igualtat se mantuvo una reciente reunión con la Unión Gremial de la Comunitat para crear una red de alerta temprana contra la violencia machista en comercios locales y de proximidad, al ser «espacios de confianza». «Se trata de que las víctimas puedan alertar de su situación disimuladamente con un gesto, tras lo que los vendedores podrán dar el aviso a los servicios especializados», señalaron.

Desde la asociación del comercio Confecomerç-Covaco Castellón, su secretaria general en la provincia, Tere Esteve, afirmó que existe interés y predisposición de los comerciantes en poder colaborar en esta iniciativa y sumarse como puntos violeta. Con todo, consideran que es un asunto sensible y ven preciso que se incida en «una formación» para los vendedores. En localidades como Vila-real el sector quiere estudiar cómo ponerlo en práctica.

En la hoja de ruta del proyecto de Conselleria, presentado a Unión Gremial, se contempla impartir cursos a los vendedores y ofrecerles orientación y una guía para hacerlo realidad «en los próximos meses». La propuesta recoge que «para que los vendedores puedan detectar una posible alerta se fije un gesto: bastará con poner la mano sobre el icono para detectar la necesidad de ayuda y activar los protocolos consiguientes de alerta temprana».

Listado de oficinas de turismo de Castellón adheridas a la iniciativa. Mediterráneo

Por su parte, las farmacias de toda la provincia ya se sumaron durante el confinamiento domiciliario durante el estado de alarma por el coronavirus como punto de atención a víctimas de violencia de género. Desde el Colegio de Farmacéuticos de Castellón recordaron que «se organizó una campaña de difusión y un convenio con la Subdelegación del Gobierno». «Las víctimas de la violencia machista bajo la palabra clave Mascarilla 19 podían pedir ayuda al personal sanitario de las oficinas de farmacias», añadieron. «En aquella época se hizo a modo de urgencia pero eso no quita que actualmente, si alguna persona necesita denunciar un maltrato y dice la palabra Mascarilla 19, el farmacéutico sabe que esta persona se encuentra en peligro y puede avisar a las fuerzas de seguridad», agregaron desde el colectivo.

Finalmente, otras vías son los canales telefónicos, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Centros de Atención a la Mujer 24 horas en Castelló y los del interior, en Sant Mateu y Segorbe.

Puestos de apoyo en ‘no fiestas’ y festivales frente a las agresiones

Los puntos violeta están concebidos, según la Conselleria de Igualtat, «como espacios, en los que se sensibiliza al público, y se atiende, informa y ayuda a víctimas de cualquier tipo de agresión sexista». Su finalidad por lo tanto es la de «concienciar, prevenir y disfrutar la fiesta bajo el respeto hacia las mujeres, libres de acoso y humillación machista». Recientemente, en localidades de la Comunitat que han celebrado actividades en semanas de ‘no fiestas’ --debido al covid-19 no se organizan al uso-- se han instalado estos puestos de atención; y los hay previstos en Castelló en festivales de música a celebrar en septiembre. Igualtat, a través de su web, cita un decálogo por unas fiestas «libres de agresiones sexistas». «Las fiestas son para que todas las personas las disfruten y no todo vale», se indica.