Un día después de lo previsto, por problemas en la página web del partido, Podem contó este viernes con un listado, aún provisional, de los aspirantes a integrar las candidaturas de la formación morada a las elecciones municipales y autonómicas del próximo año 2023.
En el caso de la capital, son ya cuatro los nombres que, en principio, competirán en las urnas internas, ya que Eduardo Castillo y Roberto Cózar se han sumado a los dos de los que informó Mediterráneo: la portavoz municipal Marisol Barceló y el responsable de Comunicación del partido en la ciudad, Adrián Ribelles, después de que Fernando Navarro anunciara previamente que no repetirá en las listas de Podem.
Además, según indicaron desde la formación se han presentado opciones para formalizar candidaturas en nueve poblaciones más entre las que también habrá primarias en cinco, siempre a falta del resultado del periodo de subsanaciones.
Por tanto, está previsto que los morados acudan a las urnas internas para elegir a sus alcaldables, además de en Castelló, en Almassora (tres aspirantes), Benicarló (dos), la Vall d’Uixó (tres), Vila-real (cuatro) y Vinaròs (dos). Mientras, en Segorbe, Betxí, Burriana y Moncofa tan solo se ha inscrito un integrante del partido para optar a encabezar la candidatura local.
Valoración positiva
La portavoz de Podem en la capital y coordinadora municipal en la provincia, así como precandidata, valoró el hecho de que haya primarias en buena parte de los municipios, ya que, a su juicio, hacen ver que «hay gente con ganas de trabajar y de llevar adelante el proyecto de Podem».
En lo que se refiere a las candidaturas autonómicas, como ya publicó este diario, son dos quienes aspiran a liderar la lista por Castellón a Les Corts Valencianes, la actual diputada en el Congreso de Podem por Castellón, Marisa Saavedra; junto a la diputada autonómica castellonense Irene Gómez, quien ya ha manifestado que tiene el objetivo de continuar con el trabajo realizado hasta ahora.
Estos movimientos internos se producen en un momento en el que las expectativas de resultados para el partido morado son muy bajas, a tenor de lo ocurrido en los últimos procesos electorales en España, pero también según las encuestas, que apuntan a una caída destacada en la representación que pueda obtener la marca.
