Barrachina saca adelante un presupuesto de 193,7 millones para 2024 para la Diputación de Castellón

El equipo de gobierno de la Diputación de Castellón, encabezado por Marta Barrachina, sacó adelante este martes en el pleno extraordinario los presupuestos para el ejercicio del 2024 con una dotación de 193,7 millones de euros.

La aprobación se produjo gracias a la amplia mayoría de la que goza el Partido Popular en la institución provincial, ya que las cuentas se toparon con el voto en contra del PSPV y Compromís, además de la abstención de Vox.

"La más realista"

«Es la semilla que retornará el protagonismo y el progreso a esta tierra», resumió Barrachina al final de la sesión, insistiendo en que se trata de una planificación económica que es «la más realista en años» y que será «muy eficaz, porque no hemos esperado ni al 1 de enero para empezar a trabajar ya en ella».

La vicepresidenta primera y responsable del área económica, Mª Ángeles Pallarés, fue la encargada de desgranar y defender las cuentas. «Son el reflejo del camino iniciado hace cinco meses: convertir a la Diputación en una institución ágil y útil», apuntó, haciendo suyas las palabras antes pronunciadas por Barrachina.

Los diferentes ejes

Impulso a los municipios (57,7 millones), dinamización de la provincia (24 millones), atención directa (13,6 millones), generación de oportunidades (5,3 millones) y apuesta por nuestra identidad (4,1 millones) son los ejes a los que se refirió Pallarés, plasmando el compromiso de «ir implentando todo lo que llevamos en el programa electoral», así como de reforzar las competencias propias, eliminar burocracia y reivindicar «lo justo» frente a otras instituciones.

Ideología y falta de diálogo

Sobre las posturas de los diferentes grupos políticos, de menor a mayor representatividad, el portavoz y diputado provincial de Vox, Luciano Ferrer, se centró en criticar la «ideología» de las cuentas, sobre las cuales dijo que «no se apartan mucho de las líneas en las que se ha gobernado la casa en anteriores legislaturas». El representante de la formación de extrema derecha también afeó que no se atendiera «ni una mínima parte de sus peticiones».

Su homólogo de Compromís, David Guardiola, defendió que el presupuesto «está lejos de las necesidades de la provincia», refiriéndose en particular a que resulta «insuficiente» en ámbitos como la emergencia climática, afrontar la despoblación o «compensar los recortes de Mazón». «No se han elaborado ni desde el diálogo con los pueblos ni con la oposición», concluyó el portavoz de la coalición valencianista.

"Sin proyecto de futuro"

Por su parte, el portavoz del PSPV, Samuel Falomir, tildó las cuentas de «decepcionantes» y aseguró que «ponen de manifiesto que el PP no tiene proyecto de futuro ni respeto por la ciudadanía de Castellón». El líder socialista compartió las críticas sobre la falta de diálogo, llegando a afirmar que «nos ofende que el actual gobierno haya heredado vicios del fabrismo, rompiendo con el consenso que buscaron los presidentes Javier Moliner y José Martí». 

«Defendemos la escucha activa», sentenció el socialista, quien echó en falta en las cuentas partidas para reivindicaciones del PP en la anterior legislatura, como los bonos de comercio, el plan de instalaciones deportivas o la supresión del tramo provincial del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) al azulejo.

Ambos toparon con la réplica de Barrachina en su intervención final. La presidenta reprochó a Guardiola las críticas a los recortes del Consell, mientras que a Falomir le acusó de acudir a la reunión que celebró el ejecutivo con la oposición «sin propuestas».