A la sorpresa por el anuncio de bonificaciones eléctricas, la patronal cerámica Ascer continúa activa con el frente abierto paralelo de alegaciones a la reforma energética. Una normativa que elimina beneficios fiscales para cogeneración y eleva el peaje eléctrico, con un coste de más de 25 millones de euros. Por ello, Ascer sigue “a la espera de una respuesta” del ministro de Industria, José Manuel Soria, a quien han invitado a acudir a la feria Cersaie, en Italia, para explicarles el impacto del proyecto del Gobierno en el sector.
Este lunes, el conseller Máximo Buch valoró que Cersaie no es el foro, que “allí se va a vender” y sería mejor reunirse en Madrid. Sin embargo, desde Ascer insisten en que “Cersaie --del 23 al 27 de septiembre-- es un buen lugar, el de mercado, donde el ministro podrá ver de primera mano cómo afectarán las medidas que está tomando el Gobierno sin tener en cuenta a sectores industriales y exportadores. Esperamos poder transmitírselo, ya sea en Cersaie, Madrid o en Castellón”. Al respecto, indicaron que “lo importante es que conozca nuestra situación y el escenario en el que competimos”.
Este rotativo consultó al Ministerio de Industria ayer, sin recibir respuesta, si Soria podrá atender la demanda de Ascer y si tiene libre la agenda para las fechas del certamen de Bolonia.
“A TODOS LOS NIVELES” // La asociación de empresarios de la cerámica manifestó que estos días no cejan en “la defensa del sector en esta materia energética, que es un proceso continuo; por lo que se actúa a todos los niveles y ante todos los agentes desde el inicio”. Entre otros, tienen “contacto diario” con Acogen, asociación estatal de cogeneración a la que pertenecen. H
