Los colectivos que agrupan a las empresas de ocio nocturno de Castellón valoran de manera positiva las ayudas aprobadas ayer en el pleno del Consell, que supondrán una inyección directa de 28.500 euros por discoteca y 7.000 por pub. Aun así, también recuerdan que llegan tarde para muchos negocios que durante la pandemia se han visto obligados a cerrar de manera definitiva. El presidente de On Castellón, Carlos Sánchez, calcula que en la provincia «son cerca de un 30% los locales que ya no han podido aguantar esta situación», pues la mayoría de ellos no ha tenido la oportunidad de atender la clientela desde mediados del mes de marzo.

Tras el visto bueno a la medida del Consell, Sánchez espera que agilicen «al máximo su aplicación y puedan llegar a todas las pymes del sector con la mayor brevedad».

Además, desde esta organización y la Coordinadora Empresarial de Ocio y Hostelería de la Comunidad Valenciana reclaman que el Consell active «una segunda fase del plan de ayudas económicas directas en paralelo al plan de desescalada y reapertura de los locales, ya que el tramo de ayudas aprobado cubre solo parte de las pérdidas que acumuló cada local en el 2020». La Federación Ocio, Turismo y Juego de la Comunitat Valenciana (Fotur) valora que la aportación de 8 millones de euros (de los que 1,45 millones corresponden a Castellón) es «fruto de un proceso de trabajo y negociación y «lo importante ahora», tal y como subrayan, «es seguir luchando para que se salven el máximo número de empresas».

Trámites

Empresarios consultados por Mediterráneo saludan la iniciativa articulada desde Turisme Comunitat Valenciana, aunque coinciden en señalar que llegan después de muchos meses de reivindicaciones. Nell Urbina, de la discoteca Santos de Castelló, menciona que agradece la aportación, «pero con esta cantidad solo se cubre una pequeña parte de las pérdidas», en conceptos como alquiler o mantenimiento de suministros de electricidad y agua. Un responsable de pubs, Iván Doblado, cree que para este segmento «el dinero se queda corto, en el caso de que se tenga un local céntrico y de renta elevada y con mucho personal». Mientras, Juanjo Benavent dice estar pendiente de la letra pequeña de los trámites.