Un grave ataque informático al corazón on line del Ayuntamiento de Castelló ha dejado KO los servicios municipales del consistorio y ha afectado a cientos de vecinos que no han podido realizar, desde ayer, las gestiones administrativas que tenían con cita previa. Por el momento, y a la espera de más datos por parte del consistorio, se encuentran inoperativas la sede electrónica, el portal tributario y la página web municipal; así como el sistema informático interno del consistorio. 

Por el momento, el Ayuntamiento desconoce cuándo la situación generada por los hackers volverá a la normalidad y el departamento de Modernización municipal y empresas especializadas en ciberseguridad analizan, desde ayer, «el incidente y trabajan para restablecer la situación a la mayor brevedad posible». 

Ataque automatizado

Según los servicios técnicos, por el momento y a la espera de un diagnóstico definitivo, todo parece indicar que se trata de «un ataque automatizado consistente en encriptar información sin llegar a acceder a la misma ni descargar datos», dijeron fuentes municipales.

¿Y el ciudadano?

Respecto al servicio de atención ciudadana que el consistorio ofrece en el Palau de la Festa y las tenencias de alcaldía del Primer Molí, Grau y las zonas Norte y Oeste, a las personas que tenían cita previa para realizar trámites, se les tomaron ayer los datos y serán citadas nuevamente cuando se restablezca el sistema. Además, a quienes tenían cita previa a partir de hoy y hasta que funcione que la situación vuelva a la normalidad, se les llamará telefónicamente para darles una nueva cita. En este sentido, hay que recordar que el teléfono de atención ciudadana, el 010, sigue operativo en el horario habitual, de 8.00 a 15.00 horas.

Por otra parte, se está estudiando ampliar los plazos administrativos durante el tiempo que dure la incidencia con el fin de que las personas que tengan que realizar algún trámite al respecto estos días no pierdan días.

Salta la alerta

La alerta de que algo no iba bien saltó a primera hora de la mañana en el Ayuntamiento de Castelló. Los castellonenses que acudieron con cita previa a realizar gestiones municipales se encontraron con que los funcionarios no podían tramitarlas al no lograr entrar en el sistema informático a través de sus respectivos ordenadores, tal y como confirmaron fuentes municipales por la mañana a Mediterráneo en el Palau de la Festa.

El servicio no estaba en activo porque los hackers ya habían logrado acceder al sistema informático. De esta forma, los funcionarios explicaron la situación a los vecinos que llegaron a primera hora a los que se les pidió que esperaran un momento. Sin embargo, el servicio no volvía y fue entonces cuando se les tomó nota para una nueva cita, dándoles la posibilidad de elegir el día que mejor les venía para retomar las gestiones con el Ayuntamiento de Castelló ya que en ese momento era imposible hacerlo. Los castellonenses que iban con el objetivo de empadronarse, registrar algún documento o, por ejemplo, sacar una tarjeta de autobús, no pudieron hacerlo. Lo que sí se facilitó fue información a las personas que se acercaron preguntando por alguna cuestión municipal los funcionarios sí que les pudieron facilitar los datos.

Otros ciberataques

El ciberataque que ayer sufrió el Ayuntamiento de Castelló no es un hecho asilado en los últimos meses. El pasado 9 de marzo, los ciberdelincuentes se ensañaron con el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), que quedó totalmente paralizado y que ahora empieza a recuperar la normalidad tras semanas de desconcierto. El virus que afectó a este organismo del Ministerio de Trabajo obligó a restaurar una copia de seguridad previa, dejando multitud de presolicitudes sin registrar.

Por otra parte, el 15 de octubre del 2019, la cuenta de twitter de la Universitat Jaume I también fue víctima de un hackeo. En esta ocasión, los atacantes amenazaron a la alcaldesa de Castelló. El fenómeno se ha reproducido en cuentas de esta red social de diversos ayuntamientos como València, Pamplona, Albacete o Carcaixent. En este último pidieron un rescate en bitcoins, al igual como sucedió en alguno de los veinte consistorios catalanes que también sufrieron un ciberataque en 2019.