La entrada al nuevo año será especial en varios rincones de la provincia de Castellón, gracias a la actuación de la Fundación Blasco de Alagón en los campanarios de Herbeset, Castell de Cabres, La Llécua, La Mata y Villores. Tras la adecuación de las torres, por fin será posible celebrar las tradicionales campanadas de Nochevieja o recibir el 2005 descorchando las botellas de cava.
El mal estado de la plataforma de volteo en la torre de Herbeset, así como el peligro de desplome de la escalera de acceso, ha hecho imposible durante años el repique de las campanas.
Los trabajos realizados por la Fundación Blasco de Alagón se han centrado en la sustitución de las vigas de madera y de las tablas de forjado. También se ha llevado a cabo la construcción de la correa de la escalera y la formación de la solera de hormigón en el pie de la torre, así como la construcción de los peldaños, la colocación de una barandilla de madera y una plataforma de baldosas de gres.
En Castell de Cabres, la Llécua, la Mata y Villores, las actuaciones de la Fundación Blasco de Alagón han tenido el cometido de recuperar estos campanarios del mal estado de conservación.
Con la puesta a punto se han sustituido las vigas de madera y forjado, reparado los muros del cierre de las campanas, limpiado paredes que forman las torres y restaurado campanas.
