Habitualmente, cuando una persona fallece se tiende a exaltar sus virtudes, pero en el caso de Vicente Zaragoza Michavila, exalcalde de la Vall d´Uixó, en vida resultó difícil encontrar a alguien que no tuviera una buena opinión sobre su persona.

Uno de los concejales que compartió con él obligaciones municipales fue Rafael Orenga (EU), quien ayer aseguró que "su vida ha sido el reflejo de la historia de la Vall d´Uixó de finales del siglo XX", de forma especial por su lucha, desde la clandestinidad y en la responsabilidad de gobierno, por la democracia y las libertades.

También tuvo un recuerdo emotivo el también exalcalde, Vicent Aparici, que gobernó en coalición con Zaragoza durante una legislatura. Aparici dijo: "Ha sido un referente del valor del diálogo y del consenso, como demostró en su primera legislatura, en la que formó equipo de gobierno con 4 partidos".

Asimismo, el actual alcalde, Josep Tur, calificó la personalidad de Zaragoza como "una figura vital para entender la lucha por las libertades y los derechos de los trabajadores".

Es importante destacar que Vicente Zaragoza Michavila fue alcalde de la Vall entre 1979 y 1991, momento en que decidió no volver a encabezar ninguna lista, pero en cualquier caso, consiguió que el Partido Comunista fuera la lista más votada mientras él estuvo al frente.

Ayer mismo Santiago Carrillo dijo de Zaragoza, en declaraciones a la cadena SER, que "fue un hombre honesto, lamento mucho su pérdida", un sentir que comparten cientos de personas en esta ciudad que vivió con este alcalde momentos muy buenos y también muy difíciles. Un hombre que supo gestionar de la manera que todo ciudadano espera que sus dirigentes gestionen los malos momentos.

Zaragoza había desaparecido de la vida pública pero, incluso ahora, sigue en la mente y los corazones de los valleros.