El Ayuntamiento de l´Alcora ha iniciado una campaña de control de tráfico para concienciar a los conductores de la necesidad de moderar la velocidad dentro del casco urbano.
Para ello, la Policía Local dispone de un radar móvil, ubicado en un vehículo policial, que le facilitará la información sobre la velocidad a la que circulan los vehículos por la zona urbana.
Durante el fin de semana se ha llevado a cabo esta campaña con carácter meramente informativo y la semana próxima comenzarán a aplicarse las sanciones correspondientes a todos aquellos vehículos --coches y motos--, que excedan considerablemente la velocidad máxima permitida, que, como ha recordado el inspector jefe de la Policía Local, Salvador Doménech, "es tan solo de 30 kilómetros por hora".
Por su parte, la concejala del área, Beatriz Gil, señala que "el fin de esta actuación no es sancionar sino garantizar la seguridad en las calles del municipio".
Esta será la primera vez que la capital de l´Alcalatén ponga en funcionamiento este radar para combatir los abusos de velocidad dentro del núcleo urbano. Otras poblaciones y ciudades ya hace tiempo que lo vienen utilizando.
El coche con el radar se ubicará cada día en un lugar diferente dentro del casco urbano.
Este tipo de controles ya se instalaron la semana pasada en zona como la calle País Valencià, cerca de la piscina climatizada, lugar en el que se detectaron varias infracciones de velocidad.
Las autoridades municipales aseguran que, pese a la colocación de bandas y pasos de peatones peraltados, siguen observándose excesos de velocidad en diferentes vías urbanas. Algo que se quiere evitar con los nuevos controles que realizarán los agentes de la Policía Local.
