Los aventajados alumnos de la Escuela Taurina de Castellón Sedano Vázquez, de l’Alcora; Jonathan Varea, de Almassora; e Iván Jiménez, de Castellón, fueron los protagonistas de la clase práctica que se realizó en la plaza Juan Renau de Sant Joan de Moró, con motivo de sus fiestas. Para la ocasión, los tres novilleros lidiaron --sin matarlos con el estoque-- tres ejemplares de la ganadería de Pedro Jovaní, de Sant Mateu.

Varea estuvo bien, aunque sin rayar a la altura de sus últimas actuaciones. Jiménez conectó mucho con el público, exhibiendo sus dotes con las verónicas, y el más joven de la terna, Vázquez de 14 años, a pesar de tocarle el peor animal, que retrocedía cuando se le llamaba, logró ponerlo en su terreno y cuajar una faena que tuvo su ovación por ser la de una mayor dificultad.

Tanto el castellonense Jiménez como el alcorino Vázquez lograron hacer sacar los pañuelos al público, aunque recibieron testimonialmente dos orejas cada participante, ya que no estaba permitido matar al astado.

Esta circunstancia hizo saltar la polémica en la localidad, ya que en los últimos festivales de poblaciones como l’Alcora sí se pudo clavar banderillas y arpones a los erales y esto era lo que esperaba el público. Esta medida se tomó para poder aprovechar la carne de los animales, que se destinará a fines benéficos. El palco fue presidido por el alcalde, Vicente Pallarés, el vicepresidente de la Diputación Francisco Martínez y el diputado José Pons. Pallarés agradeció a la administración provincial y a su Escuela Taurina la colaboración, al club taurino alcorino su apoyo para adecuar la plaza, así como a asociaciones hípicas por aportar caballos. H