La deuda del Ayuntamiento de Moncofa roza el máximo permitido por la ley, el 110%, al situarse en el 109%. El consistorio ha llegado a este nivel tras aprobar la contratación de un préstamo bancario por valor de 2,8 millones.

Así se acordó en el pleno celebrado ayer y en el que se dio luz verde a esta operación, que irá encaminada al pago de las obras de la depuradora. El débito local supera los 9,4 millones, según reveló el interventor, quien indicó en la sesión que el consistorio puede hacer frente a los gastos derivados de esta medida, aunque deberá de aplicar un plan financiero de estabilización.

El punto salió adelante por unanimidad. Sin embargo también se incluyó una enmienda del Partido Popular en la que solicitaba que en el presupuesto del próximo año se reservase una partida para amortizar la deuda.

Esta cuestión se ratificó con los votos a favor de los populares y el Bloc, mientras que el PSOE, que gobierna en minoría, se opuso, por lo que la oposición ganó la batalla al aliarse en este tema.

El portavoz del PP, Eduardo Paradís, alertó de que “con el importe solicitado y con las transferencias de crédito no habrá todavía dinero suficiente para completar los trabajos”, ya que estos ascienden a 4,7 millones de euros.

El alcalde, Jaime Picher, señaló que “esperamos que la Generalitat, la Epsar (Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales) o la Diputación aporten el dinero que hace falta”, alrededor de unos 700.000 euros.

Además, indicó que “se ha planteado un préstamo con dos años de carencia. El PSOE quiere escurrir el bulto y que se comience a pagar después de las elecciones”.

VERTIDOS // Otra cuestión que saltó a la palestra fue la de los vertidos en el Camí Cabres. Picher defendió que “la actuación fue paralizada por la Epsar y no hemos recibido las ayudas que se requerían”, añadiendo que “llevamos trabajando desde el 2011 en desbloquear la instalación”.

Los tres partidos sí acordaron solicitar la unión con un puente del Belcaire Norte y Sur. H