Un pueblo de Castellón obtiene el 30% de sus ingresos gracias a ser un 'paraíso fiscal' de los coches

La Serratella repite un año más como paraíso fiscal de vehículos en España. Este pequeño municipio tiene solo 110 empadronados, pero paradójicamente matriculó el año pasado un total de 1.479 automóviles. Es decir, a cada habitante le corresponderían casi 14 coches, 13,45 en concreto. Es el quinto a nivel nacional en el ranking.

Lógicamente, estos datos, extraídos del último Estudio sobre fiscalidad municipal del automóvil, elaborado por Automovilistas Europeos Asociados (AEA), no quiere decir que cada censado tenga una docena de coches. «Es evidente que el número de vehículos por vecino no es real, sino que esta medida que se viene aplicando desde hace más de una década favorece que las empresas pongan el foco en la Serratella», argumenta la alcaldesa, Itziar Lafita.

Y es que, como explica la munícipe a Mediterráneo, la recaudación del impuesto sobre vehículos de tracción mecánica (IVTM), la nueva denominación del impuesto de circulación, supone más de un 30% de los ingresos del presupuesto anual del Ayuntamiento.

«Hay que poner en valor que es una medida que beneficia de forma directa e indirecta al vecindario, porque no solo pagan una cantidad mínima de este tributo, sino que además, el pueblo recauda más del tercio de lo que ingresa gracias al IVTM, que es un dinero que acaba invirtiéndose después en el municipio», expone.

Un pueblo de Castellón, 'paraíso fiscal' del automóvil en España: 14 matriculaciones por persona

Un chollo para las empresas de 'renting' y de coches de alquiler

Y entonces, ¿de dónde sale ese baile de cifras entre matriculaciones y habitantes? De la diferencia de tarifas entre los múltiples ayuntamientos, que provoca que haya pequeños municipios convertidos en paraísos fiscales para compañías de alquiler de vehículos y los coches de empresa. No en vano, los titulares de los automóviles no son personas físicas, sino que en la gran mayoría de casos son empresas de renting que se ahorran miles de euros gracias a la baja fiscalidad de localidades como la Serratella. 

«Ojalá esta noticia, que se repite año tras año, sirva para dar a conocer el nombre del pueblo y animar a la gente a que venga a disfrutar de sus rincones, gastronomía y encanto», opina Lafita.