Los números son los mismos, pero las interpretaciones cambian según el partido político que lee el documento financiero final. El Consell ha presentado sus Presupuestos para 2023 con aplausos y celebraciones de las formaciones que componen el Botànic y críticas de la oposición. Así, para unos, los más de 28.000 millones del proyecto financiero son un símbolo de "estabilidad", "rigurosidad" y de "protección a los servicios públicos" y, para otros, un "acto de ilusionismo" y "electoralismo".

"Estamos asistiendo al primer cartel electoral del Consell de Puig", ha expresado el portavoz de Hacienda del grupo popular en las Corts, Rubén Ibáñez, quien ha asegurado que más allá de los números concretos que traigan las cuentas, "lo que sabemos con toda seguridad es que estos presupuestos traen aparejada una subida de impuestos que colocan a la Comunitat Valenciana en líderes en España en impuestos más altos”.

Ibáñez ha calificado los presupuestos del Consell para el año 2023 de "electoralistas" y ha indicado que estos "van a suponer más impuestos para los valencianos, más deuda pública y un acto más de ilusionismo porque no se ejecutan”. El diputado popular ha criticado que “supone un crecimiento galopante de la deuda y que las generaciones futuras van a ser todavía más pobres que las actuales gracias a las políticas de Puig”.

Las críticas se convierte en halagos al cruzar el umbral de la oposición al gobierno. En este sentido, la síndica del PSPV en las Corts, Ana Barceló, ha asegurado que “la rigurosidad y seriedad del Consell de Ximo Puig permiten que la sociedad valenciana cuente con los mejores Presupuestos por octavo año consecutivo”. Asimismo, ha señalado que las cuentas dan respuesta "ante las consecuencias económicas de la invasión de Ucrania”.

También han aplaudido las cuentas, más por el contenido concreto de cada partido sino por la forma general y lo que representan, Compromís y Unides Podem. El responsable de Presupuestos del grupo parlamentario de los valencianista, Carles Esteve, ha destacado la "estabilidad" del Ejecutivo autonómico al presentar los octavos presupuestos en ocho año y ha señalado que al gobierno valenciano "le queda cuerda para rato". "Es un buen gobierno y un buen presupuesto que sube cuando más lo necesita la gente", ha añadido.

En la misma línea, su homólogo en el grupo parlamentario de los morados, Ferran Martínez, ha exhibido que los presupuestos expansivos son "muy positivos" porque permitirán "no solo garantizar los servicios públicos sino darle una mano a la gente que más lo necesita". Asimismo, ha expuesto que las cuentas son las de "un gobierno que quiere proteger a su gente" frente a la opción "opuesta" que es la de aquellos que "bajan impuestos a los ricos para que el resto sufra las consecuencias de la crisis".