La actriz Marisa Paredes, única candidata a su propia sucesión, fue reelegida ayer presidenta para tres años más de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España en la asamblea de la institución. Y con ella repiten el productor y director Antonio Chavarrías y el guionista y director Joaquín Oristrell, como vicepresidentes primero y segundo, respectivamente.

La intérprete explicó que decidió presentar de nuevo su candidatura a la renovación de su mandato para poder "acabar un trabajo iniciado hace tres años". Paredes explica que estos años al frente de la Academia han sido, en algunos momentos "duros y cansados", pero con resultados que han compensado estos esfuerzos.

Marisa Paredes tomó la decisión de volver a presentarse hace sólo unas semanas, en París, mientras estaba rodando con el realizador argentino Edgardo Cozarinsky la película Dans le rouge du couchant, una producción franco-alemana, de la que es protagonista. En aquel momento, según confesó, la actriz parecía decidida a dejar la presidencia de la Academia para dedicarse plenamente al trabajo de actriz. Pero la estancia en París le hizo "recapacitar" y le dio energías para asumir de nuevo el reto.

"Es emocionante viajar fuera de España y comprobar el eco que tiene nuestra Academia, especialmente después de los últimos Goya". El eco de la protesta contra la guerra de Irak se reflejó también en Francia, dice.