Si algo caracteriza a Sete Gibernau, es su capacidad para sobreponerse a las adversidades. Así, después de varios sustos durante los entrenamientos previos al Gran Premio de China, el catalán fue el mejor en la sesiones del sábado y se ganó el derecho a salir primero en la carrera de MotoGP disputada esta mañana.

Su gran rival, Valentino Rossi, tuvo que conformarse con una pírrica sexta posición, por detrás de pilotos como Melandri y Capirossi, que ofrecieron mucho mejor rendimiento que el actual campeón del mundo.

"Es muy bueno ver que somos competitivos ante otra carrera y particularmente aquí, donde llegamos sin datos previos para ponernos a trabajar. Creo que es un circuito difícil, pero nosotros estamos al máximo nivel", apuntaba Sete Gibernau. "Ojalá todos nuestros esfuerzos empiecen a dar su recompensa", añadió el piloto catalán de Honda.

Por su parte, en 250cc, el australiano Casey Stoner, que ganó la última carrera en Estoril (Portugal), consiguió la pole, por delante de Dani Pedrosa y Andrea Dovizioso, segundo y tercero, respectivamente. Jorge Lorenzo fue cuarto, mientras el valldeuxense Álex Debón tuvo que conformarse con el 14° mejor tiempo.

Por último, en 125cc, el gran héroe de la jornada fue Mika Kallio, que después convertirse, hace dos semanas, en el primer piloto finlandés en tres décadas en ganar en un Gran Premio, obtuvo el primer puesto en la parrilla y demuestra que es el claro aspirante a vencer el Mundial.

Los españoles no estuvieron a la altura de lo esperado, con un Héctor Faubel que finalizó el 10°, Álvaro Bautista fue 13° y Pablo Nieto terminó el 14°.