Las posturas están muy cercanas. Robert Pirès y el Villarreal han dado el primer paso para la continuidad en el equipo amarillo del centrocampista francés, que ayer mantuvo un contacto con el consejero delegado, José Manuel Llaneza, para empezar a estudiar las opciones de renovación.

En lo que todo apunta que habrá un acuerdo rápido es en el apartado económico, ya que Pirès asegura que su continuidad no se trata de "un tema de dinero". "Dinero ya tengo. Tanto yo como mi familia estamos muy cómodos en el Villarreal y lo principal para mí es ayudar al equipo a jugar una competición como la Champions", apuntaba el centrocampista tras la sesión preparatoria de ayer en la Ciudad Deportiva.

Reducido el tira y afloja económico a un segundo término, el principal caballo de batalla en las negociaciones entre Robert Pirès y el Villarreal puede estar en la duración del nuevo contrato. El futbolista dejó ayer clara su idea. "Quiero dos años". Pero la duración de la prórroga depende de las valoraciones del club y del cuerpo técnico, que estarían más cercanos a la opción de ofrecer una sola temporada a un futbolista que el próximo mes de octubre cumplirá los 35 años.

Pirès ha mantenido en los últimos meses una postura clara: la de dar prioridad al Villarreal para continuar su carrera, por lo que asegura que no ha mantenido "ningún contacto con cualquier otro club". A pesar de estar a tres meses de la extinción de su contrato, el jugador se toma su renovación con calma: "De momento, estoy encantado de que el Villarreal quiera que me quede, pero hay que sentarse y hablar".