En el Villarreal se ha asentado esta semana el sentimiento de culpa por lo sucedido el lunes en Bilbao y también de que la visita del Valencia es el partido idóneo para quitarse el mal sabor de boca. Sergio Asenjo no es una excepción, y ya espera el derbi “para resarcirnos”. El guardameta, que vio frenada parcialmente su progresión como firme candidato al zamora de esta temporada, confía en que la imagen vuelva a ser la del equipo sólido que es en casa --solo se escaparon los dos puntos ante el Madrid-- y deje atrás las dudas que han surgido fuera de casa, “donde llevamos varios partidos que no encontramos la dinámica que queremos”.

“En casa es diferente. Nos estamos encontrando muy a gusto en el Madrigal, con nuestra gente. El estadio es un fortín y esperamos que siga así”, apunta Asenjo, que pese a que se estrena en un derbi sabe que este es el encuentro que “la afición del Villarreal espera durante toda la temporada”. Además, el portero no esconde que el Valencia es “el rival directo con el que queremos estar peleando toda la temporada ahí arriba”. Una victoria amarilla permitiría a los de Marcelino meter “una distancia importante” con los de Djukic: “Con un cuarto de Liga disputada, sacar siete puntos al Valencia sería una gran ventaja”.

Por último, Asenjo, que celebraba la disponibilidad de Bruno para el derbi --“es el capitán y la clave del equipo”, elogia--, no cree que el partido de Europa League de ayer vaya a ser un problema para los de Mestalla. “En teoría lo deberían notar, pero esto es un derbi y no existe el cansancio”. H