Tranquilidad relativa en un Villarreal B que el sábado, tras perder en casa contra La Nucía (0-1), dio un paso atrás en sus aspiraciones de meterse en plazas de fase de ascenso a Segunda División A, en una liga tan corta. «No hicimos un gran partido, pero lo tuvimos controlado. Hubo una ocasión muy clara para marcar y, de haberla aprovechado, la dirección del partido hubiera cambiado», dijo lamentándose el joven centrocampista Juanan Ros, nuevo esta temporada (2020/2021) en el filial amarillo.
«Nos hemos quedado tocados con el 0-1 final, pero toca levantarse y pensar en el próximo partido», aseguró el cartagenero, que llegó a la escuadra vila-realense procedente del Celta B. «No esperábamos esta derrota; confiábamos en sumar los tres puntos como hacemos en cada partido. Además, en casa queremos hacernos fuertes y no podemos volver a cometer un error como este», agregó el fornido futbolista del filial.
El no haber ganado supone que lo que resta de temporada se va a convertir en finales
Habituado a jugar de defensa central, en el filial amarillo su técnico Miguel Álvarez le puso de un primer momento de pivote defensivo en el centro del campo... y ahí se ha quedado. «Las cuatro últimas temporadas las jugué como central, pero ahora me toca estar más adelantado, en el centro del campo, y yo encantado. Al servicio del entrenador y a hacerlo lo mejor que pueda», recuerda.
Esta temporada, en el Villarreal B, lleva disputados 10 partidos y acumulados 671 minutos. H
