Debía ser una temporada de ensueño porque la 2020/21 era la de su histórico debut en Primera División Masculina. Pero lo cierto es que, más allá del nivel y la exigencia de la nueva categoría, el Club Waterpolo Castelló ha tenido que superar una auténtica carrera de obstáculos hasta conseguir la permanencia en la última jornada de la fase regular. Una salvación épica.
Los aplazamientos constantes de partidos provocados por los positivos detectados en las plantillas de su grupo y los constantes reajustes del calendario; los efectos del temporal Filomena, que los dejó aislados durante un fin de semana en Madrid sin poder viajar; y la adaptación del plantel a la nueva competición han sido algunas de las dificultades que el equipo que dirige Carlos Ndongo ha tenido que ir sorteando hasta conseguir su objetivo final en el presente curso, que no era otro que lograr la permanencia en Primera.
Invictos en la segunda vuelta
Si este objetivo ha sido posible de alcanzar para la entidad que preside Pepe Bausá, ha sido gracias a la gran segunda vuelta del campeonato doméstico protagonizada por los jugadores del plantel castellonense, quienes han cerrado el segundo tramo de la liga en Primera Nacional sin perder ningún partido. Unas cifras que, complementadas por el resto de resultados de sus rivales, les han permitido cerrar la temporada 2020/21 en la sexta posición del grupo B, eludiendo el descenso directo y también el play-off por la permanencia en la última jornada.
De hecho, los jugadores castellonenses llegaron al último partido sin depender de ellos mismos, pero hicieron lo que les correspondía --ganar-- y se ayudaron de otros marcadores para cerrar una histórica remontada en Primera cuando muy pocos apostaban por ellos. No es que fuera una utopía, pero el hecho de enfrentarse a uno de los rivales de la zona alta de la clasificación presagiaba un duro enfrentamiento. Pero los castellonenses vencieron por 7-12 al CN Molins de Rei (3º) y una victoria posterior del conjunto catalán ante el CD Waterpolo Málaga por 10-11 dieron una salvación con suspense al CW Castelló.
