El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero propondrá este lunes a la Unión Europa que las lenguas cooficiales españolas --catalán, gallego y euskera-- puedan utilizarse de forma oral en las sesiones ministeriales formales del Consejo, en particular cuando forme parte de la delegación española un representante de las autonomías. Se pide también su uso para las sesiones plenarias del Parlamento Europeo y del Comité de las Regiones. Así consta en el memorando por el que se solicita el reconocimiento de la Unión de todas las lenguas oficiales en España.

De esta forma, Zapatero entra en contradicción con el pacto alcanzando el viernes en Valencia entre el president Francisco Camps y la vicepresidenta del Gobierno y ministra María Teresa Fernández de la Vega, en el que acordaron que habrá intérpretes de valenciano en la UE encargados de traducir las intervenciones de los diputados y los textos oficiales, una decisión que fue acogida con satisfacción por parte del Consell, tal y como expresó ayer públicamente su portavoz Esteban González Pons (ver información de la pág 33 en Comunidad Valenciana).

CON ANTELACIÓN El memorando que el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, llevará mañana a la reunión del Consejo de Asuntos Generales y Relaciones Exteriores de la UE precisa que la intervención en una de esas lenguas deberá anunciarse con "antelación razonable" y que la interpretación será pasiva, es decir, del catalán, gallego o euskera a otras lenguas; pero no al revés.

El memorando del Gobierno en ningún momento especifica el valenciano.