El Gobierno observa con interés los últimos movimientos de la izquierda aberzale para calibrar su importancia cara a dilucidar si son el inicio del viaje hacia la condena de la violencia. Solo así podría Batasuna regresar a la legalidad, reitera el Ejecutivo. Para José Luis Rodríguez Zapatero, el de ayer es otro de los "síntomas" que le hacen albergar esperanzas de que los aberzales lleguen a tener "la valentía" de integrarse en el sistema democrático.
Esa percepción fue expresada por Zapatero el lunes, casi al final del debate sobre la ruptura del alto el fuego, en respuesta a la diputada de EA Begoña Lasagabaster. El jefe del Ejecutivo reconoció haber detectado "síntomas esperanzadores" en la izquierda aberzale, aunque precisó que aún le resultan "insuficientes". Zapatero abogó por que el partido que dirige Arnaldo Otegi se decida a participar democráticamente en el diseño de un futuro para Euskadi en paz y con "un acuerdo de convivencia libremente acordado".
En plena coincidencia con el presidente, la portavoz del Gobierno vasco, Miren Azkarate, valoró ayer como "un buen síntoma" que Otegi reconociera que ETA generó "confusión" en la izquierda aberzale cuando anunció que mantiene el alto el fuego pero no descarta más atentados.
