Los vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se juramentaron ayer para pasar página a su particular crisis y buscaron una solución de aliño para terminar con el debate sobre los gastos de sus viajes oficiales. Por unanimidad, los consejeros acordaron informar al parlamento y al tribunal de cuentas de que están dispuestos a acudir a sus sedes para darles cuenta de sus actividades, pero se negaron a que el presidente en funciones, Fernando de Rosa, cursase una comunicación oficial a estos organismos comunicándoles su disponibilidad.

Los consejeros también decidieron ayer desmarcarse por completo de las actividades de su exjefe, Carlos Dívar y pidieron al secretario general de esta institución, Celso García, que les confirmara que ninguno de ellos ha cargado al erario de este organismo gastos privados por estancias de fin de semana en hoteles fuera de su lugar de residencia como hizo Carlos Dívar.

Tras este certificado de buena conducta, los consejeros se negaron a hacer públicos sus gastos como solicitó Margarita Robles y otros tres vocales. Y con 15 abstenciones frenaron su intento de que De Rosa se dirigiera a las cortes y al tribunal de cuentas para informarles de la disponibilidad de los vocales de comunicarles sus actividades. Y es que el resto de sus compañeros consideró que esta solicitud "era ridícula" porque sus gastos no son "homologables" a los de Divar, según el vocal José Manuel Gómez Benítez. Además, el pleno --que presidió por primera vez Fernando de Rosa-- aprobó por unanimidad el plan de transparencia y austeridad que modifica las actuales normas contables de esta institución.

LAS NOVEDADES A partir de ahora, se va a crear una agenda institucional de actividades en la que se publicarán las actividades de todos los vocales y se informara del gasto de esta institución en la web de este organismo.

También se aprobó que los consejeros busquen las tarifas más baratas para desplazarse y que se alojen en hoteles que no superen los 102 euros por habitación. En cuanto a las comidas la norma será un gasto de 53,34 euros por día. Carlos Dívar se despidió ayer de sus subordinados al asistir durante unos minutos al pleno. El recién dimitido presidente del CGPJ les informó de que su cese será aprobado hoy por el Gobierno de Rajoy. Y se despidió uno a uno de los vocales tras asegurarles que no les guarda rencor.