La Historia tiene mucho futuro

El pasado puede alimentar nuestro presente y abonar nuestro futuro. La relación de los pueblos con la memoria de lo que fueron es esencial para comprender su identidad y se proyecta hacia el futuro con energía, alumbrando sus expectativas en todos los sentidos. A partir de esta constatación, el Grado en Historia y Patrimonio de la UJI ofrece una magnífica opción de formación mediante una versión integrada de sus dos ingredientes principales, siendo una de las únicas cuatro universidades españolas en hacerlo, lo que singulariza su propuesta. Así lo destaca el vicedecano responsable de la titulación, Josep Benedito, quien destaca que "el plan de estudios propone un título competitivo y con demanda, proporcionando formación teórica y práctica de acuerdo con la demanda del mercado de trabajo actual". Egresadas y egresados "pueden trabajar profesionalmente la competencia y la responsabilidad de enseñar, investigar, gestionar, difundir, defender y conservar el patrimonio histórico artístico y cultural", mediante asignaturas especializadas que les capacitan en todas estas tareas", explica Benedito.

Empleabilidad

Desmintiendo todos los tópicos al respecto, destaca la buena posición del Grado en el ránking de empleabilidad que elabora la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CYD), a partir de los datos de afiliación a la Seguridad Social, porcentaje de indefinidos, etcétera. Una de las claves en el ámbito de la empleabilidad es, sin duda, que el título facilita una completa oferta de prácticas como medio de inserción laboral. "El estudiantado puede realizarlas en museos, bibliotecas, archivos, centros de investigación, ayuntamientos y empresas, instituciones y entidades del sector cultural y patrimonial", destaca Benedito. En la valoración de los empleadores, se aprecia especialmente la versatilidad de la formación del Grado.

Testimonio

Un buen ejemplo de egresado es Daniel Cervera, hoy técnico turístico del Ayuntamiento de Cervera del Maestre, su propio pueblo. La titulación le aportó "un mayor conocimiento del Maestrat" y recuerda su paso por las aulas por la comodidad de estudiar cerca de casa, además de por "un profesorado excelente". Cervera subraya que la titulación "fue la base de mi carrera", que empezó en 2015. Poco después de graduarse, realizó formación complementaria de gestión patrimonial y logró una primera experiencia como guía del castillo de Peñíscola, de donde pasó en 2017 a Cervera, al Centro de Interpretación del Molí de l’Oli, enlazando contratos. En su trabajo actual, asegura utilizar "bastante" los conocimientos adquiridos en la UJI y desarrolla el plan turístico del municipio, en el que el castillo de Cervera supone un eje relevante.