Dos de los principales colaboradores del dictador Sadam Husein, el general Alí Hasan Majid, conocido como Alí el Químico, y el último ministro de Defensa del sátrapa, Sultán Hashin Almad, fueron interrogados ayer por uno de los jueces instructores del tribunal especial que deberá juzgar a los acusados de crímenes contra la humanidad. Los rebeldes, entre tanto, atacaron ayer varias oficinas de registro de votantes y cinco instalaciones petrolíferas del norte del país.
El magistrado del tribunal especial, el juez Raed Djuhi, advirtió que los interrogatorios de ayer forman parte de la investigación y que los juicios propiamente dichos empezarán el año próximo, cuando todos los acusados, 12 en total, entre ellos el propio Sadam Husein, se sienten frente a los jueces instructores.
El interrogatorio a los dos exaltos cargos, que comparecieron con sus abogados, se efectuó a puerta cerrada y una vez finalizados se distribuyeron las imágenes de la sesión en vídeo.
EJECUCIONES Alí el Químico debe responder sobre la matanza de más de 5.000 civiles kurdos que fueron masacrados con armas químicas en el año 1988. Además, está acusado también de participar en la brutal represión que sufrió la comunidad shií iraquí tras la primera guerra del Golfo, y del encarcelamiento ilegal y las ejecuciones extrajudiciales cometidas contra opositores del régimen.
JUICIOS PÚBLICOS El viceprimer ministro iraquí, Barham Saleh, aseguró ayer que los futuros juicios contra los 12 detenidos serán públicos y "tal vez abiertos a la prensa", añadió. Saleh negó que la premura en celebrar los procesos, a falta de poco más de un mes para las elecciones generales iraquís, se deba a "razones políticas".
Mientras tanto, ayer los rebeldes atacaron con fuego de mortero un centro de registro de votantes de la ciudad de Dujail. Dos personas murieron y ocho resultaron heridas, seis de ellas guardias nacionales. Además, entre el viernes y ayer fueron atacadas otras dos oficinas electorales en Kirkuk, localidad situada al norte del país.
En la ciudad de Beiji, por su lado, la explosión de una bomba camuflada en una carretera hirió a cuatro estadounidenses que trabajan para una empresa con base en Florida.
SABOTAJE A LAS PETROLERAS Los insurgentes también lanzaron varios ataques contra instalaciones petroleras, cinco en total en las últimas 24 horas, después de que el jueves, en una grabación sonora, el jefe de Al Qaeda, Osama bin Laden, animara a sus militantes a sabotear las infraestructuras de Irak.
