La activista iraní-estadounidense
Hale Esfandiari, detenida en Irán y acusada de "actividades contra la seguridad
nacional" fue liberada hoy bajo fianza de 3.000 millones de riales iraníes (unos
300.000 euros).
La agencia estudiantil de noticias, ISNA, aseguró además
que el sociólogo Kian Taybajsh, también iraní-estadounidense, "será puesto en
libertad asimismo bajo fianza en los próximos días". ISNA, que cita a
una "fuente conocedora" del caso de Esfandiari y Taybajsh en el Tribunal
Revolucionario de Teherán, no precisó sin embargo si las autoridades les
permitirán viajar al extranjero.
Esfandiari, directora de departamento
de estudios sobre Oriente Medio en el "Centro Internacional de Estudios Woodrow
Wilson" en Washington, fue detenida el pasado 8 de mayo después de llegar a
Teherán para visitar a su madre, de 93 años de edad.
Taybajsh fue
detenido pocos días más tarde, y las autoridades iraníes le acusaron a él y a
Esfandiari de "perjudicar la seguridad del Estado a través de actividades de
información, y de espionaje para los extranjeros", y aseguraron que "serán
tratados como ciudadanos iraníes". El pasado 12 de agosto, un portavoz
iraní anunció el fin de las investigaciones sobre su caso, y dijo que el
influyente Poder Judicial, controlado por los conservadores, se preparaba para
decidir sobre el destino de los dos activistas. La televisión estatal
emitió a mediados de julio un programa en el que los dos activistas comentaron
la naturaleza de su trabajo en centros de investigación estadounidenses sobre
Irán, y sus declaraciones fueron calificadas de "confesiones" por
Teherán.
El portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Sean McCormack,
afirmó entonces que su país está "horrorizado" por el hecho de que "gente
inocente" como Esfandiari y Taybajsh fueran mostrados públicamente en
televisión. Por su parte, el presidente de EEUU, George W. Bush, expresó
en junio pasado su "enérgica condena" por las detenciones y pidió su liberación
"inmediata e incondicional", lo que fue rechazado por Teherán al considerarlo
una "injerencia en los asuntos internos de Irán".
Varias organizaciones
internacionales de Derechos Humanos, incluida AI, pidieron en mayo a Irán que
excarcelase a Esfandiari y Taybajsh, mientras que la premio Nobel de Paz 2003,
la abogada y activista iraní, Shirin Ebadi, ha expresado su preocupación por el
estado de salud de Esfandiari, de 67 años.