Cerca de 40,3 millones de personas fueron víctimas de esclavitud moderna en el 2016, una cuarta parte de las cuales eran niños, según nuevas estadísticas sobre esclavitud mundial difundidas ese martes. Estas cifras, procedentes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Walk Free Foundation, revelan que 24,9 millones de personas estaban sometidas el pasado año a trabajos forzados en todo el mundo, y 15,4 millones, a matrimonios forzados.

El informe Estimaciones sobre Esclavitud Moderna 2017 establece que de los 24,9 millones de víctimas de trabajo forzado, se cree que 16 millones están en la economía privada, 4,8 millones sufren explotación sexual y 4,1 millones están en trabajos forzados patrocinados por el Estado, incluyendo el reclutamiento militar obligatorio y los trabajos agrícolas. Por otro lado, destaca que el 71% de todas estas víctimas son mujeres y niñas, o sea, 29 millones de personas en cifras absolutas.

«Lo sorprendente de estas nuevas estimaciones es la gran escala del comercio moderno de esclavos y el hecho de que tengamos 40 millones en todo el mundo bajo alguna forma de esclavitud moderna es simplemente inaceptable», declaró Fiona David, directora ejecutiva de investigación global de la Walk Free Foundation.

Insuficiente respuesta global / «Cuanto tienes 24,9 millones de personas trabajando bajo amenazas o coacciones en la agricultura, la pesca y la construcción o en la industria del sexo y todavía según la ONU solo se informó a las autoridades de 63.000 víctimas de esclavitud el año pasado, el abismo entre el problema y la insuficiente respuesta global queda muy claro», añadió David.

Para Andrew Foster, presidente y fundador de la Walk Free Foundation, las cifras actuales son «una vergüenza para todos nosotros». Foster incluso va más allá en torno a esas cifras: «Los resultados de los últimos cinco años para los cuales hemos recolectado datos indican que 89 millones de personas llegaron a experimentar alguna forma de esclavitud moderna por períodos de tiempo que abarcaban desde unos pocos días hasta cinco años», denunció.