Todas las iglesias de la diócesis de Segorbe-Castellón destinarán la colecta del Viernes Santo a las poblaciones iraquís golpeadas por el conflicto bélico, según informaron ayer fuentes del Obispado.

Esta decisión quiere ser un signo de "cercanía y solidaridad de los cristianos a las necesidades de los iraquís, sin distinción de credo", según las mismas fuentes. Cáritas de Jerusalén y de Bagdad serán las destinatarias de los donativos que hagan los cristianos de la provincia de Castellón el próximo viernes.

Esta propuesta será secundada por todas las parroquias del mundo. Asimismo, el obispo auxiliar del Patriarcado Latino de Jerusalén, monseñor Marcuzzo, también ha lanzado un llamamiento para que "vuelvan los peregrinos a Tierra Santa". "Es la mejor manera de testimoniar la cercanía de la Iglesia a las comunidades que corren el riesgo de sentirse solas", dijo.

Hay que recordar que en Nules y en Benicarló ya se han hecho actos religiosos por la paz. En Nules, la imagen de la patrona salió en procesión para pedir por la paz, algo que también hicieron un centenar de feligreses en un vía crucis en Benicarló.