Los resultados de los comicios en Vila-real han tenido un gran perdedor que ha sido el Partido Socialista, que con sólo seis concejales ha perdido un respecto a 1999. Los problemas internos han hecho que haya una trasvase de votos hacia el Bloc, que ha sido el gran beneficiado ya que ha unido los votos procedentes del PSOE a su línea de por sí creciente. Esto le ha permitido obtener tres ediles. El Partido Popular y Esquerra Unida se han quedado como estaban: el PP con mayoría y EU con un edil. Este empuje del Bloc ha hecho que Manuel Vilanova (PP) valore si es contraproducente ofrecer al Bloc un concejalía de peso, como es el caso de Deportes, que pueda dar más protagonismo en los comicios del 2007 al partido de Mª Gr cia Molés.

El propio alcalde, Manuel Vilanova, lo reconocía ayer y decía que tendrá "que sopesar qué concejalías ofrece a la oposición" una vez que haya hecho el reparto del equipo de gobierno.

Al examinar los datos, se observa que el PP sólo ha perdido un 1,8% del porcentaje de votos aunque en el cómputo global haya tenido 631 votos más. Esto es significativo porque tras ocho años de gobierno no ha acusado ningún desgaste por la gestión local ni se ha visto afectado por problemas ajenos como la guerra o el Prestige. Su núcleo fuerte de apoyo ha estado en el distrito uno (la zona centro) donde manda con autoridad. Esto no ha sido óbice para que haya ganado en los colegios de todos los barrios, menos en cuatro (colegios La Panderola, Pío XII y Miralcamp), de los barrios del Hospital, San Fernando y La Sénia, donde el PSOE les ha ganado de poco, pese a que siempre han sido feudos muy socialistas.

El Bloc ha tenido su fuerza en el Barrio del Pilar y la zona nueva de la Piscina Cubierta hasta el Instituto Francisco Tárrega. Así, ha credido en un 4,84 por ciento con 1.382 votos más. Sin embargo, es significativo que en las elecciones municipales haya conseguido 3.095 votos y en las autonómicas 970 menos. Por contra, el PSOE tiene en las autonómicas 7.459 votos (un 31,82%) y en las locales, 6.464, es decir baja en un 4,3%, con 995 votos menos. Este trasvase de votos o castigo de la parte del PSOE contraria a la lista de Salvador Capella en la que se encuentran todo el actual grupo municipal le ha supuesto un concejal a los socialistas. Si en los socialistas hubiera existido la unión, los resultados podría haber sido los mismo de 1999 o, incluso, haber roto la mayoría de gobierno del Partido Popular.

En la distribución de concejalías que prepara Manuel Vilanova parece que seguirán con las mismas delegaciones Juan Serrano (Urbanismo), Alejandro Amposta (Hacienda, Policía y Tráfico), Teresa Andrés (Servicios Sociales), María José Valtueña (Igualdad), Nieves Adsuara (Educación) y Ramón Tomás (Servicios Públicos, Agricultura, Medio Ambiente, Jardines y Promoción Económica), que podría dejar alguna para Manuel Mezquita o éste llevar Deportes. Del resto de nuevos ediles, Ana Delfi Martín podría coger Juventud, Juanjo Rubert volver a gestionar Cultura e Ignasi Clausell ir a Fiestas, aunque esto es menos claro.