Los gobiernos de Gran Bretaña y EEUU se apresuraron ayer a manifestar su disposición a que se apruebe una nueva resolución del Consejo de Seguridad que satisfaga la condición expresada por José Luis Rodríguez Zapatero para que las tropas españolas permanezcan en Irak más allá del 30 de junio: que actúen bajo mandato de la ONU. Su temor es que otros países sigan el ejemplo de Zapatero.

"Obviamente, apoyaremos con fuerza una nueva resolución y trabajamos para conseguirla", declaró en Finlandia el secretario de Defensa británico, Geoff Hoon. En Washington, el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, recordó que el secretario de Estado, Colin Powell, ha hablado de la posibilidad de una nueva resolución. Pero Powell ha dicho también "que sería bastante apropiado" actualizar "sobre todo la resolución 1511" que, en octubre del 2003, autorizó la creación del contingente militar internacional en Irak bajo mando de EEUU.

"No se excluye que haya otra resolución y ha habido ya discusiones en el Consejo de Seguridad", dijo el secretario general de la ONU, Kofi Annan.

SIN PROYECTO Fuentes de la ONU aseguraron ayer a este diario que de momento no existe proyecto de resolución que establezca cómo quedará el contingente militar multinacional destacado en Irak, una vez que se produzca la transferencia de poder a los iraquís, el 30 de junio.

El contingente multinacional está ahora bajo mando estadounidense y, aunque podría plantearse su transformación en una fuerza de mantenimiento de la paz --los famosos cascos azules-- bajo mando directo de la ONU a partir del 1 de julio, es altamente improbable que EEUU acepte participar en ella con sus actuales 100.000 soldados, y mucho menos que sus tropas obedezcan a un mando de la ONU.

Fuentes del PSOE fueron ayer contundentes: "Si los cascos de EEUU se vuelven cascos azules, España no saldrá de Irak".

Las mismas fuentes apuntaron también que Zapatero dedicará sus máximos esfuerzos a lograr el consenso necesario en el Consejo de Seguridad para propiciar una resolución que coloque a la ONU al frente de Irak.

En el plano político, el presidente de EEUU, George Bush, dijo que es "esencial" que las tropas internacionales, incluidas las españolas, permanezcan "al lado del pueblo iraquí".