Tous, Lacoste, Tommy Hilfiger, Dolce Gabbana, Nike, Adidas, Chanel, Loewe, Carolina Herrera y Luis Vuitton. Son las marcas de prestigio que más falsificaciones denuncian en la provincia de Castellón. Es tiempo de apretarse el cinturón y a muchos no les importa que esa prenda sea de imitación: son pocos los que pueden resistirse a la tentación de tener una camiseta, en apariencia de Lacoste, por 10 euros, cuando en una tienda autorizada se vende a 80 ó 90 euros; o invertir 30 euros en un bolso Carolina Herrera que cuesta más de 300. Los falsificadores lo saben y la policía también lo lleva detectando desde hace ya varios años. “Cada vez hay más talleres de falsificación y mafias que operan en toda la Comunitat en la venta de productos pirata. Esto va a más”, auguran todos los policías locales consultados.

El puerto de Valencia es una de las principales vías de entrada en España de este género. Solamente en este recinto portuario se intervino el año pasado un 25% del material falso de toda España, una mercancía valorada en 385 millones de euros y eso que los servicios aduaneros solo pueden supervisar un 5% de los contenedores que llegan de Asia.

Los últimos datos del Ministerio de Industria sobre este tipo de intervenciones no dejan lugar a dudas. La Comunitat Valenciana está a la cabeza en mercadeo pirata y, por tanto, también en actuaciones policiales contra este delito. Top manta, mercadillos ambulantes, polígonos industriales, casas particulares, tiendas de outlet, bajos ocultos... Los escaparates de las imitaciones que llegan a Castellón son innumerables y son pocos lo que se resisten a caer en la tentación. “La mayoría de los bolsos de marca que circulan por esta provincia son falsificados y eso lo sabemos todos los que nos dedicamos a comercializar complementos de lujo”, señala la responsable de una tienda de Castellón.

BOLSOS Y CAMISETAS // Los datos que manejan las policías locales rebelan que los artículos que más éxito tienen son los bolsos, las camisetas, los cinturones y los artículos de perfumería, fundamentalmente cremas y colonias. “La música ahora ya no se vende tanto y es época de ropa y complementos de moda”, indican. Pero aunque el material es muy dispar, la procedencia es casi siempre la misma: China y los países asiáticos, donde existen zonas que se dedican casi en exclusiva a la confección de productos falsificados. H