No hay más remedio. La única vía que tiene la industria cerámica de seguir existiendo es la exportación, a tenor de los niveles de demanda en un mercado nacional que, lejos de mejorar, continúa replegándose, y ya van cinco años consecutivos. Los empresarios fabricantes de pavimentos y revestimientos cerámicos de Castellón confirman una tendencia que, al menos, mitiga en parte los efectos de la crisis, y posibilitan la supervivencia del clúster industrial provincial, si bien no compensan el resultado final, todavía muy lejos de los valores previos a la mala coyuntura --ver gráfico adjunto en página--.

Los últimos datos disponibles revelan que el valor de los envíos de las fábricas del triángulo del azulejo a los mercados internacionales ha crecido un 14% en los dos primeros meses del 2012 con respecto al 2011, un dato que casi duplica la tasa alcanzada en todo el último año, cuando la facturación del negocio en el exterior creció en un 8%. Los empresarios, en la línea de la patronal Ascer, consideran que el dato es positivo, si bien dan por sentado que irá suavizándose a lo largo del ejercicio, pudiendo terminar al final en una tasa del “10%”.

“Es previsible que la exportación se mueva en los próximos meses en esos niveles, pero en buena medida dependerá de que el mercado de la Unión Europea, donde se destina hasta el 41% de las ventas exteriores, no retroceda por el debilitamiento económico que algunos analistas auguran” o la inestabilidad que ahora mismo se vive respecto al euro.

¿Y ESPAÑA? // Esta realidad contrasta con el mercado nacional, que empresarios y patronal vaticinan que seguirá replegándose. Ni de lejos se ha tocado fondo. Los datos oficiales revelan que las empresas cerraron un negocio en el territorio español de 705 millones en el 2011, casi 100 millones menos que en el ejercicio precedente, una cifra que también está muy lejos de los 1.871 millones del no lejano 2007. Es decir, el ajuste, espectacular, en cinco años, ha sido del 62,31%. “El parón en la construcción de obra nueva sigue acrecentando su caída. En este contexto, y al menos en el primer semestre del año, es previsible que se mantenga la tendencia del 2011 o incluso empeore”, confirma Ascer.

Incertidumbre y cautela. Y es que es muy difícil hacer previsiones “más allá del corto plazo”. “Siempre estará en función de cómo afecte la incertidumbre política y económica en los mercados de destino, especialmente en los del área de Oriente Próximo, aunque también en Rusia, donde Putin recupera el poder, o incluso Francia, donde Hollande se estrena en el Elíseo, dos mercados muy importantes para Castellón.

Asimismo, vuelven a alertar de que los márgenes se reducen cada vez más por la “guerra de precios” en la que se haya inmerso el sector, tanto entre firmas españolas entre sí como por sus competidoras extranjeras. H