Es el modelo más vendido de la historia, con casi 50 millones de unidades producidas desde su lanzamiento en 1966 y el próximo siete de marzo estrena su duodécima generación.

El Toyota Corolla vuelve a comercializarse en el mercado europeo, recogiendo así el testigo del Auris, que la marca japonesa ha venido comercializando durante los últimos años de forma exclusiva para el viejo continente.

Asociado tradicionalmente a una imagen de coche fiable y duradero pero de diseño anodino, el nuevo Corolla llega decidido a romper con esta última percepción. Su estilo exterior resulta mucho más emocional y vistoso que el del Auris y lo mismo cabe decir del diseño interior, en el que la calidad percibida también es mayor.

Toyota ha desarrollado una gama completa que incluye tres carrocerías muy distintas entre sí y cada una con elementos específicos. La de cinco puertas mide 4,37 metros de longitud y es la más dinámica y emocional; la familiar -denominada como siempre Touring Sports- se va hasta los 4,65 metros y combina una silueta muy atractiva con un gran maletero de casi 600 litros de capacidad; finalmente, el sedán mide dos centímetros menos que el familiar y se presenta como la propuesta más clásica.

MÁS EFICAZ Pero este nuevo Corolla no solo es más emocional desde el punto de vista de diseño; también hace gala de un comportamiento claramente más dinámico que el del Auris.

Además, los dos propulsores híbridos diferentes que la marca ofrece por vez primera en uno de sus modelos permite plantear una declinación básica de funcionamiento más suave y confortable, reservando para las versiones de 180 caballos un punto más de carácter y deportividad. Todas, eso sí, disfrutan de las ventajas de la etiqueta Eco.