Vecinos y visitantes que en los últimos días han pasado por la plaza Santa Clara de Castellón alertan del peligro que supone la instalación eléctrica de la Muestra de Tapas Ciudad de Castellón-San Miguel que está allí ubicada, ya que las conducciones para la toma de luz se han hecho a través de las alcantarillas, como denuncian las mismas fuentes y corroboran las fotografías de este artículo. Los cables se la energía eléctrica que deben ir por aire, se introducen por la red de alcantarillado de la plaza, con el doble riesgo que supone por su contacto con el agua y por el levantamiento de las rejas de hierro que cubren el alcantarillado y el consiguiente afectación a la seguridad de los viandantes, principalmente mayores y niños.
La deficiente instalación, que se aprecia a simple vista, pone de manifiesto la absoluta falta de medidas de seguridad en una muestra gastronómica como esta, ubicada en el centro de la ciudad y que precisa de la necesaria inspección municipal.
Las mismas fuentes denuncian, además, que hay muchos cables sueltos por el pasillo que da acceso al mercado central, junto a los pilares de los porches. Están allí, aseguran, abandonados, al alcance de cualquier persona e interrumpiendo la normal circulación de la que es una de las plazas más concurridas de la ciudad. Es fácil tropezar con los cables que están sueltos, critican.
Por todo ello, piden explicaciones al promotor, José Aguilar, y al Ayuntamiento ante la falta de control sobre las condiciones que debe cumplir un evento de estas características, como un proyecto técnico elaborado y firmado por un ingeniero y visado por la OCA, y una inspección por los técnicos municipales que haga cumplir todas las medidas que exigen las ordenanzas municipales y la normativa autonómica.
No lo consideran adecuado ni para los viandantes ni para los hosteleros que deben trabajar en unas condiciones pésimas y evidentemente inseguras. H
