La Diputación de Castellón piensa mantener la actividad laboral en la mayor parte de sus instalaciones, aunque con el uso del teletrabajo. El presidente de la institución, José Martí, acompañado del diputado de Recursos Humanos, Santiago Agustí, explicó las medidas adoptadas para hacer frente al riesgo de contagio en la administración provincial.

En breve firmarán la resolución que posibilita la labor de los empleados desde sus domicilios. En los próximos días concretarán la lista de personas autorizadas y las obligaciones que conllevará. La semana que viene, aunque pendientes siempre de las últimas decisiones que vayan adoptando las distintas administraciones competentes, pondrán «en marcha ese teletrabajo tras el diagnóstico que deben hacer los jefes de servicio», detalló Santiago Agustí.

Además, suprimen el control de acceso mediante huella dactilar y lo sustituyen por medios telemáticos. Por otro lado, antes de Pedro Sánchez anunciara el estado de alarma en todo el país, Martí avanzó el cierre de la Piscina Provincial, el castillo de Peñíscola y el centro cultural les Aules.

En cuanto a las gestiones de los ciudadanos, el presidente solicitó aplazar los trámites presenciales. El comité de prevención de riesgos laborales estableció una serie de recomendaciones preventivas frente al contagio por coronavirus en los centros de trabajo dependientes de la Diputación y medidas de higiene.