Liberado el Castellón de su eterna angustia gracias a su primera victoria en el regreso a Segunda B, que se ha demorado 14 nada más y nada menos que interminables jornadas, esta tarde comparece por vez primera en su historia en la localidad zaragozana de Ejea de los Caballeros, donde dirime una especie de duelo de David contra Goliat, que espera decantar con éxito, a diferencia de lo que narra el pasaje bíblico (17.00 horas, Footters).

El 3-0 del Alcoyano debe dejar ver el bosque de la clasificación. Ahí, no en lo más profundo pero casi, sigue apareciendo el Castellón. Sin embargo, podría no esperar a mañana para, al menos, abandonar puestos de descenso. De una tacada, puede adelantar a los tres equipos aragoneses: todo pasa por ganar, y que no lo hagan el Teruel en casa del Villarreal B y el Ebro, en la del Espanyol B.

CUATRO AUSENCIAS // Las numerosas bajas aclaran las dudas que pudiera tener Guti quien, obviamente, premiará al once de la goleada frente al Alcoyano en tierras mañas, donde Muguruza tomará el relevo del lastimado José Carlos. Si acaso, el único dilema del preparador de Catarroja reside en conocer a la pareja de Gálvez en la medular, el hombre que releve al sancionado Castells. Caballero y Theo son los claros opositores. Regalón y Máyor elevan a cuatro el número de ausencias en Ejea. Luismi es el único descartado por decisión técnica.

Al margen del portero Nahum Pedre, habitual de las convocatorias por la lesión y la operación de Jesús López, Guti se ha llevado al central o lateral izquierdo Pedregosa, al centrocampista Pablo Roig y al delantero Montoliu.

Guti mantendrá el resto del equipo. Todo lo que no sea hacerlo, supondrá una sorpresa mayúscula, en parte como recompensa, en parte porque ya no tiene mucho más donde elegir, a la espera que el director deportivo, Juan Guerrero, meta el bisturí a fondo. Pero eso no sucederá hasta enero, en el mercado de invierno, cuyas puertas deben abrirse con un Castellón rehabilitado y no descolgado de la pelea por la permanencia, que es lo que ahora debe ocupar y preocupar.

Que duda cabe que el Ejea es un rival directísimo, así que ¿qué mejor escenario que este para ganar, por fin, a domicilio? No lo hace desde el 19 de abril (226 días atrás), en aquel 0-3 en Alzira que clasificaba a los albinegros como segundos de grupo. Han transcurrido los tres desplazamientos de los play-off, una eliminatoria copera pero, sobre todo, los siete de este ejercicio, con un balance que sin ser un desastre del todo (ocho empates y tres derrotas), sin duda tampoco es satisfactorio.

Ejea vivirá el histórico partido casi como si fuera el día grande de sus fiestas patronales.

No es para menos, en su primera aventura en la categoría. Lo cual no significa que sea una mera comparsa. Un conjunto correoso y veterano, con futbolistas de la zona, que han sido capaces de tumbar en su campo al Atlético Baleares y al Valencia Mestalla; y a domicilio, al Barcelona B.