L’Alcora celebró ayer la jornada de convivencia Fem festa, Fem la Fàbrica, en la que 1.300 niños de cinco municipios --l’Alcora, Llucena, Costur, Figueroles y Sant Joan de Moró-- rindieron tributo a la Real Fábrica del Conde de Aranda de la capital de l’Alcalatén.
La celebración de final de curso, que tuvo lugar en el recinto de la Pista Jardín, supuso el epílogo al trabajo realizado por el alumnado que ha participado en proyectos educativos para poner en valor el singular inmueble, como son: La Real Fábrica al 2027, recuperemos nuestro patrimonio, sumemos competencias y restemos desigualdades; y La Real Fábrica, 300 años de innovación, memoria y territorio.
No en vano, los escolares han trabajado desde el 2017 en investigaciones y propuestas educativas que han conseguido dar vida al monumento, declarado recientemente Bien de Interés Cultural, tanto al edificio como a los elementos del entorno territorial que se relacionan con los procesos de producción: minas, molinos, hornos de cal y yeso, abastecimiento de combustible y madera o canalizaciones del agua.
ACTOS LÚDICOS // La jornada contó con infinidad de actos lúdicos y deportivos, incluida una charanga, que hizo las delicias de los alumnos asistentes a la cita, junto al profesorado, direcciones de centros y representantes del Museo de Cerámica y consistorio local.
El evento supone el pistoletazo de salida a la continuidad del proyecto el próximo curso 2019-2020, con una fecha en el horizonte: el 300º aniversario de la fundación de la Real Fábrica del Conde de Aranda, en el 2027.
